Las LESIONES POR TRAUMAS (me refiero a los que habitualmente llamamos accidentes) constituyen la primera causa de muerte y discapacidad en niños y jóvenes de entre 1 y 40 años.
Esa frase la hemos visto, escuchado y/o leído en reieradas oportunidades.
Pero quiero que entendamos de qué estamos hablando: LAS LESIONES POR TRAUMAS SON UNA ENFERMEDAD CON ALTO INDICE DE MORTALIDAD Y DESDE HACE UNOS AÑOS, VIVIMOS UNA EPIDEMIA.
Como sociedad nos cuesta tomar conciencia de esto, seguimos pensando en la fatalidad como causa de muchas desgracias.
Pero si pensamos los traumas como una enfermedad potencialmente grave, también tenemos muchas maneras de prevenirlos.
Lo primero es tomar conciencia y pensar cómo nos conducimos habitualmente.
Voy a poner algunos ejemplos simples, de la vida cotidiana, para que pensemos:
¿Cuántos de los niños que conocés (empezando por tus hijos) tiene y usan habitualmente bicicletas?
Seguramente muchos.
Cuántos de ellos, ¿SE PONEN CASCO CUANDO LAS USAN?
Seguramente pocos.
Bien, las lesiones producidas por caída de bicicletas, PUEDEN SER GRAVES Y FATALES si el niño no está debidamente protegido.
EL USO DEL CASCO EN LA BICICLETA ES OBLIGATORIO Y ES NUESTRA RESPONSABILIDAD COMO PADRES HACER QUE LOS NIÑOS OBSERVEN ESTA NORMA.
Otro ejemplo simple: ¿cuántos niños usan el cinturón de seguridad cuando viajan en el asiento trasero del auto? ¡¡¡MUY POCOS !!!
Cuando un auto recibe un impacto por parte de otro ES MUY PROBABLE QUE SE ABRAN LAS PUERTAS.
Y en ese momento ESTAR ATADO CON EL CINTURON, ES ESTAR ATADO A LA VIDA .
Ni más ni menos que eso.
Hay muchos ejemplo más del tema, pero tomé estos dos, como simple ejemplo para que nos pongamos a pensar y tratemos de cambiar algunas actitudes.
